Centla
Tras doce horas de intensa búsqueda, logran rescatar el cuerpo de conocido comerciante; se trabó en unas redes de pesca
Nefalí Ortiz
Grupo Cantón
A doce horas que pereciera ahogado el comerciante Rosendo Alcaleo González, de 56 año de edad, originario del estado de Puebla, pero radiado en la Ciudad de Frontera, a eso de las 6:00 horas de este martes fue localizado su cuerpo enredado en las redes de un pescador por la Bahía el Bosque, hasta donde personal de la fiscalía se traslado para dar fe de los hechos y ordenar el traslado del cuerpo a las instalaciones de los Servicios Médicos Forenses (Semefo) para practicarle la necropsia de Ley.
La Policía Preventiva Municipal informó que los hechos se registraron el pasado lunes como a las 19:00 horas, cuando el comerciante mejor conocido como “El Poblano”, se encontraba bañándose a orillas del caudaloso Río Grijalva por la Colonia la Costeñita en un lugar conocido como “El Playón”, pero de repente fue arrastrado por la corriente y comenzó a hundirse sin que ninguno pudiera hacer algo, según dio a conocer la dama que lo acompañaba, que dijo llamarse Carla Elena Carter y que acuátilmente era su pareja.
Al tener conocimiento de los hechos, de inmediato hicieron presencia elementos de la Policía Municipal, de la Unidad Municipal de Protección Civil (UMPC), el grupo voluntario Cruz Ámbar y elementos de la Armada de México que llegaron con una lancha, quienes luego de varias horas de intensa búsqueda por toda la orilla del afluente, los trabajos de rescate fueron suspendido por la oscuridad de la noche para reanudar la mañana de este martes.
Sin embargo, la mañana de este martes fueron informados que el pescador Perfecto de la Cruz García, que al levantar sus redes que tenía tendidas en el lugar conocido como la Ensenada, muy cerca de la Playa el Bosque, encontró enredado el cuerpo de “El Poblano”, por lo que dio aviso a la delegada de la ranchería Rovirosa segunda sección para que informara a las autoridades y fuera a levantar el cuerpo que lo colocó en una lancha y los tapó con unas pencas de guano para evitar que le diera el sol.
VENDÍA FLORES
El extinto Poblano llegó a Frontera desde hace muchos años y se dedicaba al comercio de flores, sin embargo, su primera esposa falleció hace alrededor de ocho años y la segunda apenas hace tres años, pero actualmente vivía con otra mujer, misma que lo acompañaba en sus últimas horas de vida este lunes y que fue testigo de la fatal tragedia.
